Los siete AOVES de Grandes Pagos de Olivar fueron protagonistas del almuerzo anual de la Asociación celebrado en febrero en el restaurante Pabú, en el que su chef, Coco Montes, “hizo una interpretación prodigiosa de la expresividad que nuestros aceites de oliva vírgenes extra pueden desplegar y de cómo son capaces de armonizar y ensalzar con respeto, con mimo y cariño, a todos y cada uno de los platos”, explicó Francisco Vañó, Presidente de GPO.
Coco Montés destacó que el AOVE es uno de nuestros productos estrella, fundamentales en la gastronomía, y afirmo que “comos los AOVES de GPO son tan personales y únicos, los ingredientes que formaron parte de los platos de este menú vinieron casi dictados por ellos mismos. Se jugó con el amargor de algunos AOVES, acompañándolos con platos ácidos o salinos, y otros, más frutales, los llevamos a combinaciones con frutos secos o mayor caramelización en las verduras. La gama nos permitió crear un menú único”.
Siete productores pertenecen actualmente a Grandes Pagos, fundada en 2005 por Carlos Falcó, Marqués de Griñón, Alfredo Barral y Agustín Santolaya. Los socios son ABBAE de Queiles (Navarra), Aubocassa (Mallorca), Casas de Hualdo (Toledo), Castillo de Canena (Jaén), Marqués de Griñón (Toledo), Marqués de Valdueza (Badajoz) y Masía El Altet (Alicante). Son productores procedentes de diferentes zonas olivareras que comparten un rasgo común: los AOVES deben estar producidos en un Pago, un terruño delimitado que aporta singularidad al aceite de oliva virgen extra, donde los olivos están sometidos a un control cercano y estricto.